Vasija de forma Diaguita-Inka (Cantarutti 2002; González 1995): simétrica, estructura no restringida y perfil simple. Borde recto, labio redondeado, cuerpo tronco-cónico invertido y base ligeramente plana. Tratamiento de superficie engobado (blanco exterior/interior). Está decorado con patrón ajedrezado (diseño bidireccional de origen cuzqueño sensu González 1995) compuesto por cuadros rojos con reticulado oblicuo en negro. Al interior 4 de estos campos se desprenden del borde hasta cubrir la mitad del cuerpo, marcando las esquinas del ceramio. Al exterior, estos campos se trasladan desplazadamente sobre dos ejes horizontales. Función primaria: servir y consumir alimentos (huellas de uso). Función secundaria: ofrenda.